El llanto de la pelota: Silva se retira, adiós al mejor canario de la historia, que nunca jugó en la UD y tiene una estatua en el Gran Canaria
Paco Cabrera
22/07/2023
Llora la pelota. David Josué Jiménez Silva (Arguineguín, 37 años) afronta el momento más crítico de su carrera. Exponente de la España de los violines y de la mejor generación de la historia, se retira. El mediapunta grancanario de la Real Sociedad, que nunca jugó en la UD Las Palmas -dejó varios guiños en toda su carrera del interés-, pero que tiene una estatua en el Estadio de Gran Canaria, valora colgar las botas de forma definitiva. Adiós al genio eterno.
El internacional, campeón del mundo (2010) y bicampeón de la Eurocopa (2008 y 2012), sufrió el pasado miércoles una grave lesión del ligamento cruzado anterior y está hundido moralmente. Hasta el extremo de afrontar que llega el momento de decir adiós. La noticia corrió ayer como la pólvora, a falta del anuncio oficial. Se espera que lo anuncie en los próximos días y así evitar la agonía de pasar por el tratamiento de una lesión de esta índole -que exige un plazo mínimo de recuperación de seis a siete meses-.
De esta manera, dice adiós a sus 37 años, tras sufrir el citado percance en la articulación en un entrenamiento con la Real Sociedad, aunque falta la última opinión de un cirujano. El grancanario, conocido como el Mago de Arguineguín por su calidad y control de balón, había recalado en la Real Sociedad en las últimas tres temporadas, desde que aterrizara en San Sebastián tras una larga estancia en uno de los clubes de su vida, el Manchester City (383 partidos).
Silva perteneció, además, a la mejor generación de la Selección Española y es el cuarto máximo realizador histórico. El de Arguineguín perdona su año de contrato y la Real le va a homenajear con la insignia de oro y diamantes, como detallan desde San Sebastián. El isleño tuvo su debut profesional en 2003 con el Valencia B, y es que el club de Mestalla tendría una gran importancia en sus inicios y en su carrera futbolística en general. Su padre era responsable de seguridad del campo del Valencia, por lo que Silva parecía destinado a jugar en el equipo levantino. Lo hizo durante cuatro temporadas, entre 2006 y 2010, hasta que su participación en el Mundial de Sudáfrica, llamó la atención del City, que lo fichó por 33 millones de euros y cuatro temporadas.
En el Valencia, Silva se convirtió en el asistente perfecto de David Villa y Fernando Morientes, formando parte de un equipo que compitió en Champions League y llegó a ganar la Copa del Rey en el año 2008. Su buen juego en Mestalla llamaría la atención de Luis Aragonés para convocarlo con la Selección absoluta, dónde jugaría un total de 125 partidos y marcaría 35 goles antes de su retirada en el Mundial de Rusia 2018. En la Premier, sin embargo, fue dónde Silva adquirió la talla de estrella mundial. Ganó doce títulos con los cityzens y tiene una estatua en el Etihad Stadium.
