Paco Cabrera
09/11/2023
Munir El Haddadi no está obsesionado con el gol. Es feliz. Se ha quitado un peso de encima con el tanto del Horse Power Stadium ante el Almería. Lleva una diana y una asistencia, ante el Atlético de Madrid para dejarle a Benito Ramírez una autopista para el 2-0, tras trece disparos (809’ de juego y once titularidades en doce jornadas). Indiscutible para García Pimienta, reclama su condición de depredador del área. Es su hábitat natural, el salón de su casa.
Tampoco se arrepiente de su promesa de que firmaría trece dianas al término de las 38 jornadas -la dejó sobre la mesa el 1 de agosto en su presentación en la sala de prensa de Barranco Seco-. «Todo llegará, pero lo importante es que gane el equipo». Al internacional con España y Marruecos se le trasladó si Kirian Rodríguez, Álvaro Valles o Mika Mármol atesoran nivel u opciones de jugar con la Roja de Luis de la Fuente en algún momento del curso.
La respuesta contó con gotas de humor: «Le decíamos a Kirian en la ducha que mirase la lista de la Selección, que lo mismo estaba. Más allá de la broma, están a buen nivel y claro que puede ir, así como el resto». Para el francotirador de la UD, el éxito es una cuestión de confianza y paciencia. «Los goles vendrán, aún queda mucho y lo importante es que gane el equipo (...) Al final he acabado jugando en banda y desde ahí es más complicado hacer goles. Jugaré donde me lo pida el míster, pero estoy más cómodo de nueve o de falso nueve. Trabajo para ayudar. Los goles vendrán o no, pero tengo confianza en mí mismo. Lo importante es que estamos arriba, el equipo gana y ya los goles llegarán».
Tomar el Reyno de Navarra exige una escalera. Viajan a Pamplona con la misiva de alcanzar los 20 puntos en la sexta victoria de la temporada. «Estamos con ilusión y tenemos ganas de sorprender a nuestra gente, que está ahí y siempre apoya en todos los campos. Nosotros lo damos todo y queremos seguir creciendo». Y alza la mano para tirar una pena máxima otra vez, tras fallar ante el Rayo. «Esto es fútbol, puedes fallar un penalti.
Todo se reduce a una cuestión de confianza y en trabajo. Le agradezco al míster su fe ciega [ha participado en todos los partidos de LaLiga]. Puedo aportarle bastante, ya no solo a nivel de goles, sino de trabajo. Si todos sois de Las Palmas, ¿qué prefieren, que meta goles o que gane la UD?», determinó bajo una enorme sonrisa. Porque Munir es feliz y su vínculo concluye el próximo 30 de junio. En este clima de felicidad eterna, no es descartable que amplíe su contrato.
Con Marc Cardona en el banquillo ante el Atlético de Madrid -se quedó sin participar- y Viera bajo un millón de interrogantes, Munir alza la mano. Se pide la pena máxima en el Reyno de Navarra. «Igual meto el siguiente penalti. Es cuestión de confianza. Así los llegan los resultados».
El fichaje del exjugador del FC Barcelona, Valencia, Deportivo Alavés, Sevilla y Getafe disparó la expectación en la marea amarilla. El alta de más glamour en el proyecto austero de Luis Helguera. Llegó a coste cero y gracias a la mediación de García Pimienta.
Con 216 duelos en Primera y 41 tantos, afrontó el momento más crítico de su periplo amarillo cuando malogró una pena máxima ante el Rayo Vallecano. Un sector del Gran Canaria le pitó. Pimienta ha salido en defensa de Munir de forma enérgica en cada una de sus ruedas de prensa.
«El penalti lo falla el que los tira y no se perdió por eso», determinó el barcelonés. En el casting de pólvora, el ‘17’ de la UD le ha ganado la partida a Sory Kaba, así como a Marc Cardona y a Cristian Herrera. A pesar de ubicarlo en banda en reiteradas ocasiones, Munir es más letal cerca del área. Ante el Atlético, participó en el segundo tanto de Benito y mostró su arista más explosiva. Kilómetros que generen peligro. Los kilómetros del hombre feliz.